Las autoridades de Alemania se comprometieron a tomar medidas de seguridad para proteger el Memorial del Holocausto. Esto sucedió a raíz de los actos vandálicos que realizaron hooligans alemanes en la fiesta de Año Nuevo.
«Los incidentes son indignantes y deplorables», manifestó la ministra de cultura. Monika Gruetters. Una fundación que supervisa el monumento desde el 2005, conversará con la policía para que custodien el lugar. Por último la ministra alemana aseguro que el compartimiento de los hooligans es desagradable, desordenado, estúpido, pero no constituye un delito.