El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, manifestó al regresar a su país durante un vuelo desde Tukmenistán que la región entera tendría mucho que ganar si se normalizan las relaciones con Israel, indica el periódico Yeni Safak.
Erdogan expresó que la “normalización con Israel” es posible si se alcanza un acuerdo de compensación para las “víctimas” del Mavi Marmara, y si el Estado judío levanta el bloqueo a Gaza.
Hace dos semanas, Erdogan declaró que creía que sería posible reparar las tirantes relaciones entre su país e Israel, a la luz de los acontecimientos en la región.
Erdogan hizo esos comentarios a un periodista de la Radio de Israel (Kol Israel) durante la conferencia del clima de la ONU en París, sin proporcionar más detalles.
Las relaciones entre Ankara y Jerusalén se habían deteriorando paulatinamente; a medida que el gobierno de Erdogan acentuaba su talente islamista.
Eventualmente, en 2010, los lazos colapsaron tras el intento de una flotilla de romper el bloqueo marítimo a la Franja de Gaza, controlada por el grupo terrorista islámico Hamás. Un grupo de comandos marinos israelíes, que abordó la nave turca Mavi Marmara, fue apaleado brutalmente por activistas islamistas. Los soldados se vieron forzados a abrir fuego ocasionando la muerte a nueve de los extremistas islámicos. Siete soldados israelíes resultaron heridos en el enfrentamiento, y un décimo activista turco murió en 2014, tras cuatro años en coma.
Las relaciones entre los ex aliados, Turquía e Israel se derrumbaron tras el incidente el Mavi Marmara. Turquía se ha vuelto uno de los críticos más duros de las acciones de Israel en Gaza, y los esfuerzos de reconciliación han fracasado reiteradamente.
Israel y Turquía no mantienen actualmente embajadores en sus respectivos países, sino representantes diplomáticos de bajo nivel.
Turquía es el séptimo u octavo socio comercial de Israel. El Estado judío exporta químicos como el potasio a Turquía e importa productos manufacturados y alimentos.
Fuente: Aurora