La tercera edición de “Exclusión e Inclusión” es una publicación de la DAIA elaborada por su Centro de Estudios Sociales – CES, que describe la situación de vulnerabilidad a la que están expuestos, en nuestro país, diecisiete colectivos discriminados, que lleva como subtítulo “Discursos. Estereotipos. Desigualdad de oportunidades. Prejuicio y violencias”.
Componen este texto, un libro de casi 300 páginas, la presentación escrita por el presidente de la DAIA, Julio Schlosser; un prefacio a cargo del Pedro Mouritian, interventor del INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo); el prólogo escrito por el Dr. Guillautume Boccara, Diector del Centro Franco Argentino de Altos Estudios en Ciencias Sociales, UBA/Embajada de Francia en la Argentina; una introducción a cargo de la Dra. Marisa Bryland, directora del CES y compiladora del material que integra esta obra; 23 artículos divididos en dos grandes capítulos: “Discriminación a colectivos vulnerables en la Argentina” y “Consideraciones transversales”; una reseña bibliográfica del libro “Diversidades en primera persona Hacia un imaginario inclusivo”, escrito por Ana Lía Glas y Silvia Kurlat; y una pequeña reseña biográfica de los autores de los artículos.
Integran el primero de estos capítulos los siguientes trabajos: Gitanos: “El pueblo rom y la discriminación en la Argentina”, por Julia Contreras; Afrodescendientes: “Informe sobre la situación de los derechos humanos de los afrodescendientes en Buenos Aires”, por Miriam V. Gomes; Coreanos: “Informe sobre discriminación en la colectividad coreana”, por Mirta Bialogorski / Cristina Hwang; Chinos: “Comunidad china”, por Malena Cerezo; Inmigrantes latinoamericanos: “Discriminación a inmigrantes latinoamericanos”, por Verónica Constantino; Pueblos originarios: “Pueblos indígenas”, por Carmen Burgos; Testigos de Jehová: “Discriminación religiosa. El caso de los Testigos de Jehová”, por Verónica Constantino; Musulmanes: “Discriminación a la comunidad musulmana”, por Julián Tolchinsky; Diversidad sexual: “Medios de comunicación y diversidad sexual”, por Verónica Capriglioni; Género: “Mujeres, la discriminación y exclusión de la que no hablamos”, por Marcela Gabioud; Niñez: “Procesos de exclusión y propuestas de inclusión en la niñez”, por Inés Finchelstein; Adultos mayores: “Inclusión y exclusión en adultos mayores. Celebración y desafío”, por Gonzalo Abramovich; Discapacidad: “Informarse, conocer y aprender: pilares de la no discriminación por motivos de discapacidad”, por Ana Dorfman; “Salud mental”, por Natalí Chizik; Hiv/Sida: “VIH y mujeres trans en Argentina”, por Inés Arístegui; Aspecto físico: “Discriminación por aspecto”, por Nicolás Falcone; Pobreza: “Discriminación en asentamientos informales de la Argentina. Pobreza”, por Virgilio Gregorini.
Mientras que “Consideraciones transversales” lo conforman “Sobre el decir y el hacer… Tensiones de la(s) educación para la diversidad”, por Ariel Dorfman; “La discriminación en el deporte. Estado de situación de una pasión de multitudes”, por Daniel Bajarlía; “Diez Mil Diseños contra la Discriminación. Diseñar Información para construir conocimiento y dar voz pública al problema de los colectivos discriminados”, por Esteban Rico; “Los aportes de las teorías feministas a la protección de los derechos de los mayores”, por María Teresita Ithurburu; “Cuando lo invisible se vuelve visible en las organizaciones. Primeros pasos de la gestión de la diversidad en el mundo empresarial”, por Virginia Meneghello; “De la complejidad identitaria”, por Marisa Braylan.
En la introducción, la directora del CES aclara que “Los colaboradores de esta investigación no sólo denuncian prácticas xenofóbicas de nuestra sociedad a través de sus textos, sino que también proponen algunas estrategias propositivas de transformación y apertura”.
Si bien cada uno de los trabajos publicados merecería ser comentado, por razones de espacio sólo hemos de hacerlos con dos de ellos.
“Informe sobre la situación de los derechos humanos de los afrodescendientes en Buenos Aires”, escrito por Miriam V. Gomes, es una corta pero muy interesante reseña de los afrodescendientes que desde tiempos de la Colonia han vivido en Buenos Aires, y que de acuerdo a la autora, presidente de la Sociedad de Socorros Mutuos “Unión Caboverdiana” en la actualidad rondaría en un 10% de la población de Buenos Aires, y que se generó una “desaparición artificial” debido a que la denominada “Generación del ‘80” del siglo XIX intentó “blanquear a la población del país “como requisito para el desarrollo y el progreso del vasto territorio nacional, con habitantes genéticamente blancos y europeos”, por lo que “En los documentos oficiales la gama de la población denominada negra, mulata, parda, morena, zamba, de color, pasó a llamarse ‘trigueña’, vocablo ambiguo que pude aplicarse a diferentes grupos étnicos y a ninguno, y gracias a este cambio de definiciones, a fines de 1887, el porcentaje oficial de población afro bajo al 1.8 %”, cuando a principios del siglo XIX era el 30,1% en la ciudad de Buenos Aires, y del 40 al 50% en provincias como Córdoba y Santiago del Estero.
Otro dato interesante que nos brinda este artículo es la nómina de organizaciones de afrodescendientes, y que la mayoría de las mismas fueron fundadas por mujeres.
Verónica Constantino, en “Discriminación religiosa. El caso de los Testigos de Jehová” afirma “La discriminación de la que son objeto, se relaciona con las contradicciones que surgen, en la sociedad actual, cuando ésta se enfrenta a una concepción de vida basada en la interpretación del Antiguo y Nuevo Testamento, como determinante de los comportamientos del grupo”, y lógicamente se adentra en los temas que popularmente son conocidos, como su negativa a las transfusiones de sangre, o el “uso y veneración de los símbolos patrio”, y hasta hace unos años su negativa a cumplir los varones con el servicio militar obligatorio.
Este trabajo nos brinda la explicación que los profesantes de esta religión justifican sus posturas, a la vez que las mismas, por ejemplo han influido positivamente en el derecho de los pacientes al ser tratados medicamente, a la vez que han intensificado el desarrollo de tratamientos alternativos, que son aplicados con éxito, si bien sus voceros reconocen que la discriminación hacia ellos no se extinguió y que cada tanto surge en los medios periodísticos, por ejemplo.
Consideramos que este trabajo, al igual que los dos que lo antecedieron, son un importante aporte de la DAIA en su tarea de luchar contra todo tipo de discriminación en el país, que completa eficazmente el ya tradicional informe anual sobre los hechos antisemitas que se producen en la Argentina; y por lo tanto que debería ser un material de lectura obligatoria tanto para los docentes como para todos aquellos que nos ocupa y preocupa la discriminación que, en todos los niveles y ámbitos existe en nuestra sociedad, pues como bien dijo Marisa Braylan en la presentación de este texto “nadie puede decir me salvé de ser discriminado”.
Por Lic. Eduardo Alberto Chernizki