La Universidad Central de Cataluña (UVic) firmó en 2013 dos convenios con centros académicos israelíes que presentó como estratégicos para la Facultad de Medicina. Cinco años más tarde, los convenios han expirado sin que hayan dado ningún fruto, según admite la UVic. El acuerdo con la Universidad de Haifa ha finalizado este noviembre y el portavoz, Ilan Yavelberg, anuncia que quieren renegociar el acuerdo, aunque la UVic lo descarta. El concejal de la CUP en Vic Joan Coma afirma que la presión del BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel) y la plataforma Complicidades que Matan, han sido determinantes para cancelar los convenios y han influido en la decisión.
El ex rector de la UVic Jordi Montaña suscribió los convenios durante la visita oficial de Artur Mas a Israel de noviembre de 2013. El acuerdo más importante, con el Campus de Salud Rambam, expiró en 2016 sin que se materializara ningún proyecto . «El Campus Rambam se convierte en el socio internacional para la consecución de uno de los proyectos estratégicos de futuro de la Facultad de Medicina», publicó la UVic en su revista corporativa. El acuerdo con la Universidad de Haifa debía aportar iniciativas de investigación conjuntas e intercambios de estudiantes.
La firma de los acuerdos generó una ola de críticas desde la izquierda, que cuajó en un manifiesto con más de 400 adhesiones, entre ellas las de la CUP, ICV, EUiA, las juventudes del PSC, las de la senadora de los comunes Sara Vilà y la del diputado también los comunes Joan Mena, del abogado Julià de Jòdar o la del concejal de ICV en Vic Arnau Mañana, entre otros. Los firmantes denunciaban que «las instituciones académicas israelíes no son ajenas al desarrollo y mantenimiento de este sistema de control institucionalizado y fragmentación territorial a que se ve sometido el pueblo palestino. En son parte necesaria e imprescindible «. El texto advertía sobre la Universidad de Haifa que «patrocina, conjuntamente con el ejército,
Reunión con el rector
La UVic subraya que los movimientos de boicot a Israel no han tenido ninguna influencia en su decisión. Coma y otro firmante del manifiesto, el dirigente de ERC Isaac Peraire, son vocales de la Fundación Universitaria Balmes, el órgano titular de la UVic. El concejal de la CUP explica que centros como Rambam o Haifa son más potentes que la universidad osonenca: «El único interés que tienen para establecer acuerdos con la UVic es para legitimar la acción del Estado israelí». Como está convencido de que «si no hubiéramos presionado, la universidad debería potenciado más los acuerdos». Coma y otros representantes de Complicidades que matan se reunieron este noviembre con Joan Masnou, el rector en funciones. Masnou, según Coma, les transmitió que «la universidad no tenía especial interés en firmar más convenios con Israel». Una portavoz de la UVic comenta que el rector recibe a representantes de múltiples ámbitos, hay discrepen o no. La UVic confirma que, con respecto al contrato con la Universidad de Haifa, «se ha extinguido después de 5 años sin materializar ningún acuerdo. No forma parte de nuestras prioridades renovarlo una vez ya ha vencido «.
«Siguiendo nuestros procedimientos habituales, prevemos iniciar una negociación con la UVic para renovar los acuerdos», explica Yavelberg. El portavoz de la Universidad de Haifa destaca que el boicot académico a Israel «es contrario al espíritu académico, la promoción de un diálogo cultural constructivo, y al libre y democrático intercambio de ideas».
La campaña internacional Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS), promotora de las acciones contra los acuerdos con la UVic, tiene un apartado dedicado a las movilizaciones contra las universidades israelíes. BDS presentó un manifiesto en 2014 contra la cooperación con universidades israelíes firmado por 1.200 catedráticos, profesores e investigadores académicos de España, con nombres como la presidenta de la Asamblea Nacional Catalana, Elisenda Paluzie, Joan Subirats, Arcadi Oliveres o el desaparecido historiador Josep Fontana. BDS ha destacado este año por sus acciones contra la presencia en Cataluña de la selección femenina de waterpolo de Israel, y contra la participación del equipo Israel Cycling Academy en la Vuelta Ciclista a Cataluña: «El equipo invitado está patrocinado por Ministerio de Turismo israelí,
«ANTISEMITISMO PURO Y DURO»
Andreu Lascorz, presidente de la Asociación de Relaciones Culturales Cataluña-Israel (ACCI), cree que la campaña de BDS «es antismetisime puro y duro». «Yo soy crítico con cosas que pasan en Israel, pero me los creeré cuando boicoteen universidades de regímenes como China», dice Lascorz. El presidente de la ACCI opina que no querer colaborar con universidades israelíes limita la capacidad de conocimiento de los centros catalanes. Lascorz, que es representante en España de la Universidad Ben Gurion, comenta que a raíz de unos convenios suscritos entre esta institución israelí y la Universidad Rovira i Virgili, la UVic va contactarlo reiteradamente para establecer vínculos con la Ben Gurion: «Nunca se concretaba nada y, de repente, dejaron de estar interesados », recuerda Lascorz.
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