La guardia presidencial de Corea del Sur está reforzando las defensas en torno a la residencia oficial del suspendido presidente Yoon Suk-yeol, con el objetivo de impedir su arresto.
El fin de semana pasado, las autoridades no lograron detener al político.
Según trascendió, debía acudir a una investigación programada, pero no lo hizo.
A principios de esta semana, un tribunal emitió otra orden de arresto contra Yoon Suk-yeol tras el vencimiento de la anterior.
En respuesta, en Corea del Sur se informó de que la guardia presidencial había desplegado alambres de púas y bloqueado las carreteras con autobuses alrededor de la residencia presidencial, convirtiéndola en una fortaleza.
Además, se han desplegado cientos de guardias adicionales para proteger la residencia.
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Frente a la residencia se están produciendo protestas tanto a favor como en contra del presidente derrocado, y cada una de ellas reúne a miles de personas.
Yoon fue derrocado por el parlamento después de intentar imponer la ley marcial, lo que equivale a un golpe militar.
El presidente suspendido espera una decisión del Tribunal Constitucional sobre si lo destituirán permanentemente mientras las autoridades continúan investigando su intento de golpe de Estado.
A pesar de haber sido citado tres veces, el político no se ha presentado para ser interrogado.
Después de esto, las autoridades obtuvieron una orden de arresto, pero Yoon permanece dentro del recinto presidencial, protegido por la guardia.
Fuente: Israel National News.