El Rabino Daniel Goldman, quien en el mes de marzo será uno de los integrantes principales de un viaje a favor del diálogo interreligioso que tendrá como destinos Israel, Jordania, los territorios palestinos y una reunión con el Papa Francisco, explicó en VIS A VIS los motivos de los encuentros y la búsqueda de poder difundir en el mundo lo que en Argentina ya es una costumbre.
– ¿Cómo se inicia la idea de este viaje?
Surge como parte de una tarea que venimos desarrollando conjuntamente con el profesor Omar Abud, de la comunidad islámica, y con el presbítero Guillermo Marcó, responsable de la pastoral universitaria. A partir de ahí y de un encuentro con dirigentes de la comunidad judía, musulmana y de la Iglesia Católica, decidimos transformar de algún modo aquello que nos resulta natural y normal en Argentina que es el encuentro en «material exportable», para lugares donde existen conflictos y todavía el diálogo es algo complicado. En este caso, el Instituto del Diálogo que está trabajando conjuntamente con el Congreso Judío Latinoamericano en todo lo que sea la logística de este viaje, busca poder reunir gente que representa a los tres espacios, y nos permite mostrar una Argentina donde el diálogo es algo característico.
– ¿Cuáles son los lugares en los que estarán?
En una semana vamos a estar en Jordania, posiblemente con el Rey, que todavía no se confirmó pero está casi definido, con el presidente palestino Mahmoud Abbas, con el presidente de Israel, Shimon Peres, y con el Papa Francisco.
– ¿Se busca generar un diálogo mayor entre estas partes?
Justamente queremos mostrarle la posibilidad al mundo sin una intención de andar diluyéndolos en uno solo. Que partir del diálogo, el respeto y la convivencia se puede lograr un futuro distinto.
– En ese sentido, ¿el Papa Francisco está marcando una línea de construcción del diálogo?
Creo que es una línea que ya la venimos construyendo desde hace mucho, y hoy en día se cristaliza en declaraciones que el Papa Francisco está teniendo, pero que venimos trabajando en esto hace mucho tiempo atrás, y creo que es característico de la cultura argentina pensar en este diálogo.