Cuando en el año 1949 se creó como FAM, y en los ’70 se transformó en FACCMA, ninguno de los dirigentes de ese tiempo se habrían imaginado el crecimiento que tuvo y cómo se convirtió en una de las federaciones centrales de la comunidad judía argentina y una de las mas importantes del mundo.
Ya hace casi 40 que »me siento FACCMA», ¿y qué es sentirse FACCMA?
Era levantarme a la mañana cada fin de semana con ganas de preparar el bolso, revisar lo que hay adentro y salir para el partido.
Era el reunirse en algún punto para salir todos juntos.
Era jugar, disfrutar si ganamos y enojarme si perdemos.
Era la picada posterior.
Era esperar el entrenamiento y averiguar el horario del partido.
Es conocer gente que ya son mis amigos desde hace más de 30 años.
Es dirigir a chicos, jóvenes y veteranos durante 20 años.
Es ir a una Macabeada y disfrutar el «mejor» fin de semana del año.
Es tener el privilegio de participar en cinco Macabeadas Mundiales y Panamericanas durante diez años como entrenador.
Es conducir durante diez años un programa de TV dedicado exclusivamente a las actividades de FACCMA. Hacer lo mismo en radio. Hacer lo mismo en un sitio web.
Es entregarle el legado a un hijo que ya participó en tres Macabeadas con tan solo 18 años y poder compartir con él la emoción más grande que pude tener «gracias a FACCMA», que es haber desfilado juntos en la última Macabeada Mundial.
Es conocer las paredes y los olores de cada casa propia, como así se denominaba la primera propiedad después de haber deambulado por los clubes y hasta en el restaurant del querido Bernardo Paley donde pude asistir a las primeras reuniones de delegados: pasar por la calle Perón, por Rivadavia, por H. Yrigoyen, y ahora en el edificio de la Sociedad Hebraica Argentina.
Y para que yo me sienta FACCMA tuvieron que existir los dirigentes que forjaron esta federación y formaron nuevos dirigentes, que a su vez tomaron el legado y lo trasladaron generación por generación.
Para que yo me sienta FACCMA cada fin de semana hay 43 instituciones y miles de deportistas que tienen su torneo organizado, sus árbitros disponibles y un lugar de pertenencia.
Para que yo me sienta FACCMA hay dirigentes que entregan su tiempo, hay profesionales que entregan su capacidad, hay clubes que entregan sus instalaciones y hay deportistas para poder jugar.
FACCMA cumple 65 años y comenzó a festejar, los torneos que antes se denominaban Sindelar, ahora se llaman 65° aniversario, seguramente habrá más festejos, habrá más torneos, habrá mas Macabeadas, como siempre, habrá más motivos para que yo me siga sintiendo FACCMA.
Gustavo Szpigiel
Director Técnico Nacional de Fútbol