El diputado nacional por el PRO, Sergio Bergman, dialogó en exclusiva con la CADENA JUDÍA DE INFORMACIÓN VIS A VIS e hizo un análisis profundo de las elecciones nacionales que se llevaron adelante el domingo pasado.
Bergman aseguró que «fue la ciudadanía la que decidió que haya un balotaje entre Mauricio Macri y Daniel Scioli». También se refirió a cómo será la relación entre los dirigentes comunitarios y la comunidad judía en caso de que Macri sea el presidente de la Argentina a partir del 10 de diciembre e hizo una reflexiòn sobre la dirigencia de la comunidad
– ¿Cómo viviste en el búnker de Cambiemos el festejo por lograr llegar a un balotaje histórico en la Argentina?
– La novedad electoral tiene un análisis, pero el clima de la sociedad es el dato más relevante. No hace falta interpretar los resultados para corroborar que la sociedad Argentina, que se estima más de un 60% ,quiere un cambio y por eso celebró. Está semana vivimos con la sensación de tener un aire renovado en la Argentina nueva que se viene.
– ¿Qué análisis haces de las elecciones y del balotaje que se viene?
– Es un punto de inflexión; que no se puede subestimar a la gente y que nadie es dueño de los votos. Algunos partidos políticos que tienen viejas estructuras, aparatos partidarios y personajes que han degradado a la política y estafado la confianza de la gente.
Empieza a desatarse de la escena política Argentina cuando desde la soberbia, la impunidad y el autoritarismo suponían quedarse para siempre. Eso me parece que es un dato muy relevante. Hay que darle la gratitud y el reconocimiento a la gente, por qué muchos eran escépticos de que el pueblo argentino no podía reaccionar y que terminábamos como Venezuela. Que no íbamos a poder salir de esa trampa de la demagogia populista. Sin embargo, la gente con sentido común, valentía, y criterio supo cortar una boleta de casi un metro en la Provincia de Buenos Aires y le dio a Maria Eugenia Vidal un triunfo histórico que hace a la historia del distrito por primera vez, ya que en una elección se eligió a una Gobernadora joven con mucho coraje, valor, capacidad, honestidad y transparencia ejemplar. Yo creo que es muy similar a la gesta del 1983, cuando recuperamos la democracia electoral, y después esa democracia la profanamos, la degradamos en una demagogia populista que termina siendo la de los últimos 12 años. Y ahora se viene el gran desafío, el 22 de noviembre, volver a recuperar la democracia de la demagogia y a la Repùblica del populismo. El día del balotaje vamos a volver a tener una República plena de democracia.
– En caso de que Mauricio Macri se consagré ganador del balotaje, el próximo 22 de noviembre ¿Cuáles crees que van a ser los cambios que se producirán con respecto a la relación con la dirigencia comunitaria y con la comunidad judía?
– Yo particularmente no creo que haya mayores cambios. Me parece que en la agenda de Cambiemos en relación a lo que tanto dice interesarle a la dirigencia judía, por qué no necesariamente les interesa, ya está pre-marcada y no depende de los dirigentes y de la comunidad. Son firmes convicciones de Mauricio y del espacio político; uno de ellos es derogar el acuerdo vergonzoso e inconstitucional de encubrimiento con Irán que es plantear, claramente, un activación política de investigación de los dos atentados, y fundamentalmente, de la causa AMIA dónde hoy está tan muerta como el ex fiscal Alberto Nisman. Cambiemos y Mauricio Macri, en particular, tiene muy en claro que la comunidad judía está integrada a la sociedad Argentina y que no va a caer en la trampa de algunos dirigentes comunitarios que pretenden ser los virreyes judíos del Río de la Plata, y suponen que para hablar de la comunidad judía hay que hablar con ellos.
– ¿A quiénes te referís con los virreyes judíos del Río de la Plata?
– A cualquier dirigente de la comunidad judía que por qué cree que gana una elección con 5.000 o 10.000 votos de afiliados a una mutual o por qué un club de sello de goma de instituciones de vices-presidentes se transforman en referentes de los judíos en Argentina. Eso no es cierto. Una cosa son las instituciones centrales históricas de la comunidad, y otra cosa es confundir eso emblemático y simbólico con la potestad que no se tiene, ya que no se puede hablar en nombre de los judíos de la Argentina. La comunidad judía no participa activamente de elegir a sus representantes por qué en la AMIA debieran votar todos los judíos, y sólo lo hacen los socios, y la DAIA, es una especie de club privado de dirigentes que se eligen entre sí para ver quién es presidente.
– Hace una semana las diputadas Bullrich y Alonso se presentaron ante la Justicia con una lista de personas de la política y del periodismo que fueron espiados ¿Te sorprendió?
– Yo diferenció el tema mediático y el efecto que eso pueda tener con respecto al tema institucional. En lo referido a lo institucional es muy grave, eso está en contra de la ley. El Gobierno Nacional y las fuerzas de seguridad han participado de actos de inteligencia interior que están prohibidos por la ley. Por supuesto que tiene actuar la Justicia. No puedo decir que me sorprendió, de hecho los argentinos nos acostumbramos a cosas que no debiéramos asumir como normales, como puede ser el hecho de que nos estaban escuchando. Lo que creo es que no podemos dejar el efecto mediático y debemos seguir el camino institucional. Yo espero que a partir del 22 de noviembre cuando la justicia vuelva a ser independiente, investigue este tipo de situaciones, que haya una investigación seria, y que los responsables sean condenados. Lo mediático no nos va a resolver un problema de total indefensión, y al mismo tiempo, son situaciones características de regímenes autoritarios, como lo es este gobierno.
– ¿Entonces no vas a realizar una denuncia penal en forma personal?
– Sí dentro del proceso del sumario y cuando avance la investigación. En está instancia se están tomado algunas medidas, y me presentaré a la Justicia en tiempo y en forma, pero la denuncia personal la evaluaré fuera del calendario electoral.