Mike Pence, el vicepresidente de Estados Unidos, fue hasta el cementerio judío atacado esta semana en Saint Louis, donde se destruyeron casi 200 lápidas (NOTA: Cerca de 200 tumbas fueron destruidas en un cementerio judío de Estados Unidos), y «se arremangó» para colaborar en el rearmado del lugar.
«El pueblo está inspirando a la nación con su compasión por la comunidad judía. Gracias por mostrar al mundo lo que es Estados Unidos», publicó Pence en su cuenta oficial de Twitter.
«Vamos a demostrar que este vil acto de profanación no es lo que somos», afirmó en el lugar de los hechos el gobernador (judío) de Missouri, Eric Greitens.