Tras conocerse el atentado terrorista con más muertos en las historia de los Estados Unidos, tras el 11 de septiembre, que dejó un saldo de más de 58 muertos y 500 heridos en Las Vegas mientras se desarrollaba un Festival de Música. La Municipalidad de Tel Aviv, como lo hace siempre en casos de ataques terroristas, se solidarizó con el pueblo estadounidense, con las víctimas y sus familiares poniendo la bandera norteamericana en el frentre del edificio.
Según confirmó el Estado Islámico, Stephen Paddock, el hombre que abrió fuego contra la multitud desde un piso 32 de un hotel, era «un soldado del ISIS» y fue abatido inmediatamente por la policía de Las Vegas.