Diferentes medios iraníes publicaron su relato sobre el avión venezolano iraní retenido en Buenos Aires y culparon a Israel y los judíos.
A principios de agosto, el Departamento de Justicia de EE.UU. dijo que buscaba apoderarse de un misterioso avión que volaba por Sudamérica. Era un avión de carga venezolano 747 pero que “anteriormente era propiedad de una aerolínea iraní que supuestamente tiene vínculos con grupos terroristas”. Estuvo en tierra en Argentina desde principios de junio. El avión quedó varado en Argentina, pero parte de su tripulación había salido del país. Ya estaba en el centro de atención de varios detectives en línea y otros.
Los medios iraníes ahora publicaron su versión sobre el avión venezolano, y el hijo del piloto alegó que Israel, los judíos argentinos y EE.UU. están detrás de un complot para mantener el avión y su tripulación en tierra. Antes de entrar en las afirmaciones iraníes, vale la pena saber qué sucedió.
“La solicitud de EE.UU. enviada a Argentina siguió a la apertura de una orden en un tribunal federal en el Distrito de Columbia que se emitió el mes pasado, y que argumenta que el avión fabricado en EE.UU. debería confiscarse debido a violaciones de la ley de control de exportaciones de EE.UU.”, informó CBS.
Además, el avión fue “transferido de la aerolínea iraní Mahan Air, que según los funcionarios brinda apoyo al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán-Fuerza Quds, a Emtrasur, una subsidiaria del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos, o CONVIASA, de propiedad estatal de Venezuela. CONVIASA está bajo sanciones de EE.UU.”.
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El avión de carga llegó a Argentina el 6 de junio después de un vuelo desde México. Supuestamente también intentó aterrizar en Uruguay. Era una tripulación de 14 venezolanos y cinco iraníes. Irán y Venezuela, por su parte, son aliados. El país persa vendió drones de Caracas en los últimos años y envió barcos y comercio a través de Venezuela.
Dos semanas después de que surgieron los informes, los venezolanos protestaron contra la puesta a tierra del avión. Los informes arrojaron que uno de los tripulantes se llama Gholamreza Ghasemi, “un iraní vinculado al Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica, un poderoso servicio militar iraní, separado del ejército regular, que opera la Fuerza Quds y se lo considera una organización terrorista por el gobierno de EE.UU.”, según el Centro Wilson.
Ese mismo informe dice que “EE.UU. e Israel supuestamente proporcionaron información sobre las conexiones iraníes del avión y sobre Ghasemi, quien se desempeñó como director ejecutivo de Fars Qeshm Air. Estados Unidos acusa de suministrar armas y equipos sensibles a los representantes de Irán en Siria y Líbano. Según los informes, las autoridades turcas y brasileñas también proporcionaron información a Argentina sobre el avión y sus conexiones con Irán”.
Fars News de Irán entrevistó al hijo del piloto. La organización de noticias dice que detuvieron el avión “con la coordinación de EE.UU., el régimen sionista e Inglaterra”. Irán también mostró su enojo con los medios de “oposición” que destacan el papel del avión.
El hijo del piloto, Ghasemi, explicó los detalles del arresto de su padre y la tripulación iraní en Argentina. “Y en una parte de la conversación mencionó el papel de EE.UU. y el régimen sionista en este incidente. Y dijo: ‘Este incidente definitivamente se planeó porque cuando el avión quiere volar, también debe tener permisos de aterrizaje en el aeropuerto de destino, permisos de tránsito de los países de ruta y aeropuertos alternativos'», aseveró Fars News.
Vía JPost