En los últimos días, la policía de Australia aumentó la recompensa económica para aquella persona que brinde información sobre los atentados en Sídney de 1982.
Según los informes, la recompensa pasó de 100 mil a un millón de dólares, reportó Israel National News.
La policía cree que Hussayn al-Umari, terrorista palestino y sospechoso de formar parte del atentado, todavía está en Australia.
Durante los atentados de Sídney en 1982, al menos tres terroristas palestinos colocaron bombas en la puerta del consulado israelí y en el Hakoah Club.
Paul Toole espera que el aumento de la recompensa sea el “empujón final” para que el público ofrezca información sobre el sospechoso.
“Estos dos horribles ataques dirigidos fueron actos internacionales de terrorismo y, a pesar de los grandes daños causados al consulado israelí y al Club Hakoah, somos extremadamente afortunados de que nadie haya muerto”, continuó Toole.
Por su parte, Darren Bark, director ejecutivo de la Junta de Diputados Judíos de Nueva Gales del Sur, declaró: “Estos atentados fueron un acto de terror en suelo natal contra australianos inocentes con la intención de matar”.
Leer más – En el Hospital Israelita de San Pablo luchan por salvarle la vida a Pelé
Leer más – Asumió como presidente de un club y renunció a los tres días acusado de antisemita