Lufthansa, junto con otras aerolíneas, canceló sus vuelos hacia y desde Beirut en medio de temores de represalias israelíes contra un ataque con cohetes de Hezbolá el sábado que mató a 12 niños y adolescentes en la ciudad drusa de Majdal Shams, en el norte del país.
Fue el ataque más letal de Hezbolá contra Israel desde que comenzó la guerra del 7 de octubre contra Hamás, lo que se suma a las preocupaciones de que Israel y el grupo terrorista libanés respaldado por Irán podrían involucrarse en una guerra a gran escala.
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Hezbolá ha negado haber disparado el cohete, pero Israel ha rechazado la negación, señalando que el grupo había dicho que disparó contra el área y presentó evidencia de que la munición utilizada era de fabricación iraní y de uso exclusivo de Hezbolá en el Líbano.
En respuesta, los funcionarios israelíes, incluido el primer ministro Benjamín Netanyahu, prometieron una respuesta dura contra Hezbolá, y el gabinete de seguridad autorizó al gobierno el domingo a responder.
Desde el 8 de octubre, las fuerzas lideradas por Hezbolá han atacado comunidades israelíes y puestos militares a lo largo de la frontera casi a diario, y el grupo dice que lo está haciendo para apoyar a Gaza en medio de la guerra allí.
Hasta el sábado, los ataques han resultado en 24 muertes de civiles en el lado israelí, así como en la muerte de 18 soldados y reservistas de las FDI.
