El gigante finlandés Nokia anunció esta semana que acordó la adquisición de la startup israelí Rapid, especializada en los protocolos de integración de software entre distintas aplicaciones y a la que consiguió a precio de ganga, según destacó la prensa local.
Rapid llegó a estar valuada en mil millones de dólares hace solamente dos años, pero -según señaló el portal israelí de noticias económicas Globes- la operación se habría concretado por una suma muy inferior que Nokia no informó en el comunicado sobre la adquisición.
«Fuentes de la industria tecnológica creen que la empresa se vendió con fondos en efectivo sobrantes de la ronda de recaudación» del 2022, con «un valor estimado de 150 millones de dólares», indicó Globes.
El ecosistema de la informática y la alta tecnología de Israel a menudo funciona también como un verdadero shopping para los gigantes del sector, que pagan cientos de millones de dólares por startups nacionales, en especial del terreno de la ciberseguridad.
A veces las multinacionales encuentran empresas emergentes a precio de oferta, como ocurrió con Rapid, que saltó a la fama en medio de un auge del interés por las interfaces de programación de aplicaciones o APIs (por la sigla de Application Programming Interfaces).
Puentes para desarrolladores
Las APIs, explican los expertos, son las definiciones y protocolos que usan los desarrolladores informáticos para integrar el software de distintas aplicaciones y permitir así que se comuniquen.
Es lo que ocurre, por ejemplo, cuando ingresamos a un juego online o a un portal de noticias a través de nuestra cuenta de Facebook o Google.
Al momento de lanzarse comercialmente, Rapid se presentó como el hub capaz de brindar un lugar único para encontrar y usar APIs «en lo que parecía ser un mercado muy fragmentado», recordó el portal TechCrunch al comentar la adquisición.
«Pero no está claro que Rapid haya encontrado una ruta hacia la rentabilidad al brindar ese servicio», sentenció el sitio de noticias tecnológicas, que señaló además el «giro interesante y ligeramente irónico» de esta operación.
En los ’90, «Nokia marcó el ritmo de la construcción de redes móviles en todo el mundo y se convirtió en el fabricante de teléfonos número uno» del planeta, rememoró TechCrunch. Pero a principios de siglo «perdió el rumbo» cuando llegaron los teléfonos inteligentes de Apple y Samsung.
Ecosistemas extensibles
Algunos analistas dijeron que «una de las mayores fallas de Nokia fue su incapacidad para construir un ecosistema extensible para aplicaciones y terceros para sus teléfonos inteligentes», justamente la necesidad que cubren las APIs y sus proveedores.
«Por eso es tan interesante que ahora se esté posicionando como un facilitador para ese mismo propósito», completó el portal.
En todo caso, Nokia decidió adquirir Rapid como parte de ese posicionamiento y celebró la operación.
Los operadores, dijo Raghav Sahgal, el presidente de los servicios de nube y redes de la firma finlandesa, «necesitan un puente para conectarse con miles de desarrolladores para impulsar la creación de valor para empresas y consumidores y monetizar sus redes».
«La tecnología de Rapid» y su «talentoso equipo de I+D, junto con Nokia, nos permitirán ofrecer una sólida plataforma de infraestructura API para acelerar el desarrollo de productos relacionados» e impulsar la adopción en toda su amplia comunidad global de desarrolladores», completó.
Fuente: Israel Económico.
Talento israeli al adelanto tecnologico