La nueva ministra de Justicia, Ayelet Shaked expresó que buscará encontrar un nuevo equilibrio para controlar la Corte Suprema por sobre el Parlamento y el gobierno.
Este nombramiento ha causado un gran revuelo en Israel y en el extranjero sobre las políticas judiciales de su partido, que los opositores dicen que dañan la democracia. En su discurso inaugural Shaked minimizó estas preocupaciones de la oposición y se comprometió a mantener el Estado de la Corte que ha sido aclamado por el presidente de Israel como un defensor de las minorías en un país sin constitución formal.
Desde su entrada en el parlamento en 2013, Shaked, de 39 años de edad, ex ingeniero de software, ha apoyado varios proyectos de ley controvertidos que tendría un impacto en los poderes de la corte.
Fuente: Jerusalen Post