Mientras crece el misterio por el avión venezolano-iraní detenido en Ezeiza, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) se presentó como querellante en la causa. La entidad reclama que no dejen salir del país a los tripulantes de la aeronave.
En su presentación, le DAIA también exigió que le retengan los pasaportes a los iraníes que viajaban en la aeronave y que no dejen salir del país al avión hasta que no avance la investigación, reportó Clarín.
El avión, un Boeing 747-300M matrícula YV3531 de la empresa venezolana Emtrasur, se encuentra retenido en el Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, a cuya terminal de carga arribó el lunes 6 de junio.
La presencia del avión en suelo argentino despertó todo tipo de sospechas luego de que varios diputados de la oposición presentaron pedidos de informes sobre la situación de la aeronave.
Leer más – AMIA y DAIA exigen el total esclarecimiento de la situación generada por el avión venezolano, vinculado a irán, retenido en el país
En un comunicado en conjunto, AMIA y DAIA exigieron el total esclarecimiento de la situación generada por el avión venezolano, vinculado a irán, retenido en el país.
«La retención en nuestro país de un avión operado por la empresa venezolana Emtrasur, y vinculado a la compañía iraní Mahan Air, sancionada por los Estados Unidos por sus vínculos con actividades terroristas, constituye un hecho que debe ser esclarecido con urgencia por las autoridades nacionales.
AMIA y DAIA, organizaciones centrales de la comunidad judía argentina, exigen una información exhaustiva y detallada sobre el listado de tripulantes que viajaban en la mencionada aeronave y los motivos de su paso por el país.
De acuerdo con lo establecido por la justicia argentina, los atentados del 17 de marzo de 1992 contra la embajada de Israel en Buenos Aires y del 18 de julio de 1994 contra la AMIA, que aún permanecen impunes, fueron planificados y ejecutados por el Hezbollah, un grupo terrorista financiado y apoyado por la República Islámica de Irán.
Cabe recordar que algunos de los acusados iraníes, que en la actualidad son funcionarios del gobierno de dicho país, y que tienen pedidos de captura internacional, han circulado recientemente por países que los reciben y protegen, burlando la exigencia de la justicia local y de Interpol.En este preocupante escenario, que hemos denunciado en repetidas oportunidades, resulta pertinente exigir a los organismos de control a cargo que brinden, con celeridad y precisión, la información requerida y los resultados de la investigación que se está llevando a cabo, ante un hecho que despertó sospechas y confusión».