El pueblo judío se unió para colaborar con la familia del rabino Avraham Anshin, asesinado hace pocos días en la ciudad de Beit Shemesh (Israel).
Anshin dejó en tierra a diez pequeños y una viuda destrozada: el domicilio carece de electrodomésticos básicos para el día a día.
Los vecinos que conocen la casa, la describieron como “pobre y vieja, con los muebles rotos y la cocina sin horno”.
La comunidad judía comenzó a recolectar dinero para poder ayudar a la esposa del fallecido y sus hijos. Así lo informó Israel National News.
“Fueron tan sensibles las imágenes de los pequeños en el funeral que decidimos poner dinero”, señaló mediante redes sociales un usuario tras enviar dinero.
El rabino, de 33 años, falleció el cuatro de septiembre luego de ser atropellado por un camionero en la calle Rabbi Meir Baal Hanes.
Los médicos asistieron al lugar para brindarle los primeros auxilios a la víctima que no logró sobrevivir debido a la gravedad de las heridas.
La viuda expresó: “Paigey estaba sentada con la cara blanca y le costaba enfocar, en sus brazos yacía un animal, un bebé de seis meses que ya no podrá ver a su padre”.