A raíz de la actual guerra de Israel contra Hamás, el Ministerio de Aliá e Integración lanzó un nuevo plan el pasado miércoles por la mañana para fomentar la aliá, donde mejorará la “infraestructura” disponible para los nuevos olim antes y después de su llegada a Israel.
El ministro responsable, Ofir Sofer, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el presidente de la Agencia Judía, Doron Almog, anunciaron el plan en una conferencia de prensa conjunta.
El plan incluye tres principios centrales: la aliá como motor de crecimiento económico; Aliá como parte de una comunidad; y la solidificación y fortalecimiento de la infraestructura de integración en Israel.
Según el informe, los nuevos olim que elijan vivir en el Néguev , Galilea o Judea y Samaria recibirán 2.000 NIS al mes de alquiler durante sus primeros dos años en el país; las familias jóvenes recibirán financiación completa para el alquiler en los “centros de integración comunitaria”; un plan para estudiantes universitarios incluye matrícula completa, un año de estudio en su lengua materna, ayuda para el alquiler y acompañamiento comunitario; un nuevo programa acompañará a las personas que decidan hacer Aliá ya en sus países de origen; una actualización a los estudios hebreos digitales y comunitarios complementará la reforma del año pasado en el estudio hebreo (“ulpán”); y más.
El costo aproximado del plan es de 170 millones de NIS, repartidos en dos años, y el Ministerio de Aliá e Integración recibirá un aumento de 55 millones de NIS en el presupuesto renovado de 2024, que se espera que se convierta en ley el próximo mes.
Según un comunicado de prensa, el plan surgió como resultado del fuerte aumento del antisemitismo en Estados Unidos y Europa desde que estalló la guerra el 7 de octubre, lo que ha llevado a un aumento dramático en el número de personas que se registran para aliá: 300 % de aumento en Francia en comparación con el período paralelo del año anterior; un aumento del 100% en EE.UU.; 150% en Canadá; y el 40% en el Reino Unido.
El Ministerio de Aliá e Integración decidió llamar al plan “Af al pi chen” (“sin embargo”) en honor a un barco de inmigrantes anteriores a la independencia de Israel que llegaron a la Tierra de Israel como parte de la “Aliyá Apuesta”, enviando el mensaje que a pesar de la guerra, los judíos seguirán haciendo aliá.
“Hubo quienes intentaron separarnos, pero nos unieron fuertemente o tal vez solo nos recordaron que somos uno… Hay quienes intentaron desarraigarnos de nuestra tierra, y [ahora] verán aliá”, Dijo Sofer.
Además, enfatizó que la razón del aumento de la aliá no era sólo el antisemitismo sino también la “profunda solidaridad” que la diáspora judía ha mostrado hacia Israel desde el estallido de la guerra.
Fuente: Jerusalem Post.
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