Mientras los terroristas de Hamás roban la ayuda humanitaria, Israel comenzó a trabajar el martes para conectar una instalación de agua de Gaza a su red eléctrica, a fin de proporcionar suministro de agua a mediano y largo plazo a los civiles palestinos en Gaza a un ritmo de hasta 20.000 litros por día.
Fuentes de las FDI dijeron que la nueva política es un aspecto crítico para mantener la legitimidad de Israel a nivel mundial para poder continuar la guerra contra Hamás.
Desde que la Corte Internacional de Justicia emitió una orden a principios de primavera que podría interpretarse como una orden para poner fin a la guerra, las FDI e Israel han estado bajo fuerte presión para ir más allá de una asistencia mínima a los civiles palestinos y facilitar una asistencia humanitaria que satisfaga mayores expectativas del mundo.
Por otra parte, fuentes de las FDI dijeron que el mundo había quedado atónito por el éxito de Israel evacuando a 1,4 millones de civiles palestinos de Rafah a principios de mayo, sin provocar un nuevo desastre humanitario.
Gran parte de ese éxito, dijeron fuentes de las FDI, fue una planificación a largo plazo para anticipar las necesidades de agua y alimentos de los civiles palestinos, y con el verano alcanzando temperaturas récord en la zona, si no se lograba que la instalación de agua en cuestión funcionara a toda velocidad, podría haber tenido consecuencias humanitarias nefastas, según Enlace Judío.
Además, fuentes de las FDI dijeron que los 1,4 millones de palestinos evacuados están casi todos en al-Muwasi en la costa de Gaza, en el oeste de Khan Yunis o en Deir al-Balah en el centro de Gaza y que esta instalación permitirá satisfacer sus necesidades de agua, todo lo cual fue parte de que Estados Unidos no se opusiera fuertemente a la invasión de Rafah y las acciones militares en curso allí.
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Diferentes fuentes de las FDI han dicho que el ejército necesita seis meses o más de actividades en Rafah para eliminar los túneles transfronterizos del Corredor Filadelfia de Hamás hacia Egipto, a fin de poner fin a la capacidad de Hamás de rearmarse a través del tráfico de armas desde el país vecino.
El ejército dijo que son ajenos a quién estaba o no al corriente de esta medida en la coalición gobernante, pero la conexión eléctrica para la instalación de agua fue aprobada por el Ministro de Defensa, Yoav Gallant.