Una mujer judía de 88 años fue brutalmente golpeada en un ataque en un suburbio del norte de París: se trata de la abuela de la diputada israelí Sharren Haskel.
Se dirigía a un análisis de sangre en un barrio judío cuando dos «matones árabes» la atacaron por detrás, denunció Haskel.
Antisemitism in France has been surging for a long time, and since October 7th, it has become unbearable while the French government remains indifferent. The French government allows the spread of blood libels against Israel on media, resulting in the Jewish community suffering…
— Sharren Haskel השכל שרן (@SharrenHaskel) July 4, 2024
La abuela de la diputada fue golpeada, empujada al suelo, escupida y llamada “judía sucia”.
El Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (CRIF) informó que también la llamaron “vieja sucia” y le dijeron “esto es lo que te mereces”.
Este ataque dejó a la abuela de Haskel con dientes rotos, hematomas en todo el cuerpo y fuertes dolores. El CRIF confirmó que se abrió una investigación policial.
Haskel dijo que dudó en hacer público el incidente porque había bandas de jóvenes árabes que iban a los barrios judíos a acosar a los residentes y ella no quería que su abuela fuera el blanco de las críticas.
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La diputada manifestó su desesperanza de que las autoridades francesas pudieran atrapar a los perpetradores o abordar los problemas más amplios del antisemitismo en el país, ya que “fracasaron una y otra vez en la defensa de los judíos”.
Francia, dijo Haskel, ahora tiene anarquistas y partidarios del terrorismo que llaman a la violencia contra los judíos en las calles.
También acusó al gobierno francés de permitir “la difusión de libelos de sangre contra Israel en los medios, lo que provocó que la comunidad judía sufra violencia, violaciones y asesinatos”.
Haskel dijo que la situación de los judíos en Francia se está reflejando en países de todo el mundo. Y que sólo unos pocos países como República Checa y Alemania están adoptando una postura al respecto. Además, hizo un llamamiento a los judíos de la diáspora para que emigren a Israel, su «hogar nacional, cultural e histórico».
“Ya no puede ser una iniciativa personal o civil, el gobierno (israelí) necesita tomar una posición agresiva contra el antisemitismo”, aseveró. Y señaló que “las comunidades judías de todo el mundo son una parte integral de nosotros y tenemos una gran responsabilidad hacia ellas”.
El CRIF afirmó que el incidente puso de relieve “la realidad del antisemitismo en Francia”, en la que jóvenes y mayores reciben “ataques a diario por su identidad judía”.
Vía JPost