El jueves, terroristas de Hamas mataron a Islam Hijazi —directora del programa de la organización Heal Palestine, que trabaja para brindar apoyo médico a la Franja— cerca de un hospital en Khan Younis después de que ella se negó a entregar al grupo terrorista los fondos de caridad que había recaudado.
Según testigos presenciales, tres terroristas de Hamás enmascarados detuvieron a Hijazi el jueves por la noche y le dispararon alrededor de 90 balas cuando se dirigía a visitar a unos pacientes.
Los informes de Gaza señalaron que el motivo del asesinato fue la apropiación por parte de agentes de Hamás de una gran parte de la ayuda y los fondos que ingresaban a la Franja a través de donaciones, reveló Ynet.
«Islam era madre de dos niños pequeños, una mujer humana con el más alto nivel de ética y profesionalidad. Se quedó en Gaza con la intención de ayudar a los demás. Siempre decía: ‘Me quedo aquí para ayudar a nuestra gente'», afirmó la ONG en un comunicado tras el asesinato.
Iyad Khader, un residente de Gaza, publicó en las redes sociales después del asesinato lo siguiente: «Recientemente se ha establecido una mafia en la parte sur de la Franja para saquear, matar, robar y aterrorizar a los residentes. Se debe declararles la guerra de inmediato».
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«No es el primer caso de este tipo», afirma Hussein Jamal, un investigador político de Gaza.
«Lo cierto es que a diario se asesina a civiles y nadie habla de ello. Por desgracia, Hijazi era muy conocida; de lo contrario, nadie habría sabido las circunstancias ni los detalles de su muerte», argumentó.
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