El grupo terrorista palestino Hamás y el partido Fatah de la Autoridad Palestina acordaron crear un comité para administrar conjuntamente la Gaza de la posguerra, dijeron el martes los negociadores de ambas partes.
Según el plan, que necesita la aprobación del presidente de la AP, Mahmud Abbas, el comité estaría compuesto por entre 10 y 15 personalidades no partidistas con autoridad en asuntos relacionados con la economía, la educación, la salud, la ayuda humanitaria y la reconstrucción, según un borrador de la propuesta visto por AFP.
Hasta el momento, no está claro si Israel aceptaría el acuerdo que se está formulando. Israel rechaza cualquier papel de Hamás en Gaza después de la guerra que el grupo terrorista inició el año pasado, y también ha dicho que no confía en la Autoridad Palestina de Abbas para dirigir el enclave.
La delegación de Fatah, encabezada por el miembro del comité central del partido Azzam al-Ahmad, regresará el martes a Ramallah para buscar la aprobación final de Abbas, dijeron a la AFP negociadores de ambas partes. Por su parte, la delegación de Hamás estuvo encabezada por el miembro del politburó Khalil al-Hayya.
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Tras las conversaciones en El Cairo mediadas por Egipto, las dos facciones rivales acordaron que el comité administraría el lado palestino del puesto de control de Rafah en la frontera con Egipto, el único cruce del territorio que no se comparte con Israel.
El cruce de Rafah, una importante vía de ayuda humanitaria hacia Gaza, ha estado cerrado desde que Israel lo tomó en mayo, y las autoridades egipcias se niegan a cooperar con las fuerzas israelíes para mantener abierta la puerta.
La guerra estalló el 7 de octubre de 2023, cuando Hamás lideró un devastador ataque transfronterizo contra Israel que mató a 1.200 personas, en su mayoría civiles. Los miles de terroristas que arrasaron el sur del país también secuestraron a 251 personas.
La respuesta militar de Israel tuvo como objetivo destruir a Hamás como poder gobernante en Gaza, garantizar que no se pudiera volver a llevar a cabo ningún ataque similar y liberar a los rehenes.
Fuente: Israel National News.
Por mis pagos hay un dicho que reza: «Le sucede lo mismo que a la iglesia de Itatí, no tiene cura». Esto aplica a cualquier trato o acuerdo que firme Hamás. Otro dicho muy funcional aclara: «Pan para hoy, hambre para mañana», lo cual significa que cualquier acuerdo con grupos terroristas vale por un tiempo, hasta que consiguen reorganizarse y rearmarse, amén de la propaganda que desparraman por el mundo para dejar a Israel como victimario y a ellos como víctimas. Logrado esto, preparémosnos para otra feroz embestida. Los fanáticos musulmanes jamás van a reconocer la existencia de Israel; y como para ellos Israel no existe como país, sus invasiones, matanzas y secuestros son justificados por su sustento ideológico. El concepto de “guerra santa” que promulga el Corán es razón suficiente para atacar a Israel, asesinar a su población, secuestrar a quien sea (recordar que muchos de los secuestrados y asesinados por Hamas son turistas extranjeros, niños y bebés).
¿Qué se puede esperar de gente que asesina a niños y a bebés y viola mujeres en forma sistemática y colectiva? Por supuesto, mujeres que provienen de los “enemigos” iraelíes. La Historia demuestra que los gobiernos árabes pseudodemocráticos y sin justicia independiente, como el Líbano, son débiles y, además, fanáticos; jamás los gobiernos árabes van a encontrar a los terroristas culpables de nada, ni los encerrarán ni condenarán y no serán juzgados en forma independiente porque la justicia independiente no existe en sus países, son estados teocráticos, regidos por leyes coránicas (religiosas) y el pensamiento libre y laico brilla por su ausencia. Personalmente, no tengo esperanzas de una paz durable ni expectativas de que las partes respetarán el convenio de no agresión. Los grupos terroristas tienen, por FUERA de las fuerzas “militarizadas” y “militares”, un número incontable de francotiradores, subgrupos de guerrilleros, individuos que se autoinmolan con bombas, misiles, drones y lo que se nos ocurra. Y armas soviéticas. Y con Cuba y Venezuela votando en contra de Israel. Y no olvidemos la U.N., la O:E.A., la O.T.A.N. y las demás organizaciones e instituciones “democráticas” occidentales, que se pegan a los países árabes como moscas a la miel por si acaso aquellos quieren fomentar un boicot y no les venden más petróleo o gas. Por eso, tampoco creo en las demostraciones de “buena voluntad” de los países occidentales, porque los petrodólares tienen mucho más peso que las vidas humanas. A Occidente no le interesa ni Israel ni sus habitantes. Solo los mueve el interés económico y comercial, son una rémora que se llena la boca con endechas a los “derechos humanos”, pero que en cuanto te das vuelta, te clavan el puñal por la espalda. Lamentablemente, esa es la realidad: más de 5.780 años de persecuciones, espontáneas o sistemáticas, fundamentan mi pesimismo. No deberíamos dejarnos engañar: NUNCA, PERO NUNCA HABRÁ PAZ EN MEDIO ORIENTE MIENTRAS EXISTA ISRAEL, PORQUE LOS MUSULMANES TERRORISTAS NO VAN A RENUNCIAR A SU EMPEÑO DE ECHARLO AL MAR, JUNTO CON SUS HABITANTES Y APODERARSE POR MEDIO DE LA MUERTE, LA PERSECUCIÓN Y EL SECUESTRO, A SUS METAS IMPERIALISTAS, POLÍTICAS Y RELIGIOSAS.
Repasen la Historia desde el Génesis y sean conscientes de la cantidad de veces que los islamitas intentaron pasar las fronteras y apoderarse de Europa. Así tal vez salgan de la credulidad.
Asi es!!!