Detuvieron e interrogaron a Liri Albag, sobreviviente del cautiverio de Hamas, en el aeropuerto JFK de la ciudad de Nueva York.
Albag, llegó a la Gran Manzana con sus amigos para disfrutar sus vacaciones y le informaron agentes de control de pasaportes estadounidenses de que era «sospechosa de ser una impostora» porque todavía figuraba en el sistema como en cautiverio.
Después de una hora de interrogatorio y con la asistencia del Consulado de Israel en Nueva York, Albag fue enviada de regreso a su país.
El padre de Liri, Eli Albag, quien estaba en el extranjero al mismo tiempo, declaró al Canal 12 ; «Ella seguía figurando como secuestrada, pensaron que alguien había entrado con su identidad. Le quitaron el teléfono, pero le permitieron hacer una llamada. Me llamó a mí y, después, a su madre, Shira, quien involucró a las Fuerzas de Defensa de Israel y a muchas otras autoridades».
El informe señaló que el consulado israelí ayudó a la rápida liberación de Albag del interrogatorio, a pesar de estar cerrado por el Día de los Caídos. El cónsul general Ofir Akunis se aseguró de que se le permitiera ingresar a los EE. UU. antes de partir hacia Israel.