Matteo Renzi, el más joven primer ministro entrante de Italia, ha establecido una agenda progresista para sus primeros 100 días en el cargo, y se espera que se desplace a su país más cerca de Israel. Renzi es bien conocido como un partidario del Estado judío, después de haber tomado una postura firme contra la agresión de Irán.
Su ascenso al poder podría traer algunos cambios en la política exterior. Ha marcado a la República Islámica como la «madre de todos los desafíos en Medio Oriente», y apoyo a la oposición al gobierno persa denominada «Movimiento Verde» en 2009. Renzi también ha expresado reservas con respecto a la aprobación de Italia sobre la oferta de los palestinos para mejorar su estado de la ONU a finales de 2012.
El demócrata de centro-derecha dice que tiene la intención de llevar a cabo reformas constitucionales y una nueva ley electoral antes de finales de febrero.
El primer desafío de Renzi es formar un gobierno de coalición que pueden ganar más de las dos cámaras del Parlamento, un reto ya que su reciente poder ha distanciado incluso algunos en su propio Partido Demócrata. Si tiene éxito, el político de 39 años de edad, se convertiría en el primer ministro más joven en la historia de Italia.