Florencia Chattah, docente de historia judía en ORT Belgrano fue una de las ganadoras del concurso de Premio Marcha Por la Vida, y dialogó con VIS A VIS reviviendo lo que fue el día de la premiación y contando de que se trató su monografía. El jurado estuvo integrado por el Rabino Alejandro Avruj, el Rabino Abraham Skorka, Diego Vovchuk, la Licenciada Alejandra Tolcachier y el Dr. Daniel Rafecas.
El Premio Marcha por la Vida es auspiciado por la Federación de Comunidades del Judaísmo Conservador (FEDECC) y brinda una beca completa y un viaje a Polonia e Israel. La ganadora Chattah escribió una monografía llamada : «El pincel de las víctimas: un acercamiento artístico de la Shoa», y sobre esto comentó: «Escribí sobre el arte como una forma de resistencia durante la Shoá y una herramienta en contra del negacionismo después de la guerra. Analice primero posiciones teóricas sobre que pasaba con el hacer estética del Holocausto, y a partir de ahí analice algunas obras, puntualmente de dos artistas que pintaron durante la guerra; por un lado tome la óptica de un pintor que murió en la guerra, y por otro lado tome la perspectiva de aquellos que lucharon en la guerra con las obras de un pintor del ejército ruso, que libero los campos de concentración de Auschwitz y Majdanek y pintó que fue lo que vio en esas liberaciones». Además agregó: «A partir de ahí analice como el arte servía al momento de la guerra como resistencia cultural, de mantener la humanidad y de todo aquello que nos constituye como humanos. Otro de los puntos que analice sobre como sirvieron estas obras para dar testimonio de la época, las políticas del gobierno nazi y cómo se vivían después del Holocausto».
La docente de ORT expresó cómo se enteró de la convocatoria de FEDECC: «La escuela me hace un pedido, un par de semanas antes de que se lance la convocatoria de esta institución, para que armemos una clase sobre el arte y la shoá. De ahí es donde surge toda esta investigación, que semanas después me llega esta convocatoria, así que ese fue el motivo real».
«Fui sola a la entrega de premios. Había un espacio en mi cabeza para la posibilidad de ganarlo, pero nunca pensé voy a ir con alguien por las dudas. Cuando escuche mi nombre lo primero que pensé fue mi mamá tenía razón, la debería haber dejado a que me acompañe. Fue muy emocionante. Esto de recibir el premio y que mi trabajo haya sido elegido por un jurado de tanta excelencia me resulta una satisfacción por el reconocimiento al trabajo», sentenció Chattah.
BUENO FLORENCIA TU MADRE TENIA RAZÓN Y ELLA TE VEÍA RECIBIENDO EL PREMIO, TE ESPERAMOS EN ISRAEL PARA QUE DISFRUTES DE TUS VIAJES A POLONIA YYA ISRAEL, UN GRAN ABRAZO DE LUZ EXTENSIVO A TODA TU FAMILIA FELICIDADES, DESDE EILAT HELEN MARAN.