El actual diplomático y ex vicecanciller argentino, Roberto García Moritán, dialogó en exclusiva con la CADENA JUDÍA DE INFORMACIÓN VIS A VIS sobre cómo quedó el mapa político-internacional luego de los brutales atentados en París. Además, explicó cómo esta posicionada hoy la Argentina ante los ataques del ISIS.
– Algunos analistas políticos internacionales ya habland de que estamos en el inicio de la Tercera Guerra Mundial, ¿es apresurado?
– No lo sabemos aún. Hay indicios que señalan que estamos ante una era de confrontación con estos grupos integristas islámicos que no sabemos qué alcance pueden tener. Es un fenómeno nuevo, como se está manifestando en los últimos años. Si uno ve los atentados terribles en París hubo una circunstancia de lo más novedosa; los terroristas que intervinieron eran marroquíes, argelinos, belgas, etc. Todos eran de distintas nacionalidades, eso ya es un elemento distinto de lo que hemos visto hasta ahora. Los combatientes del ISIS parecen ser de 50 países distintos. Por eso estamos ante un fenómeno de características muy extrañas que a veces uno no sabe cómo analizarlas con cuidado. Es evidente que las manifestaciones y lo sanguinario que es el Estado Islámico pone en evidencia que, quizás, estemos ante un período prolongado de actitudes fundamentalistas, y que tienen al mundo entero como su propio enemigo, según sus manifestaciones.
– ¿Considera que Europa reaccionó tarde ante la expansión del ISIS?
– Yo no se si han reaccionado tarde o realmente estos grupos tienen la capacidad de acciones imprevistas en cualquier momento. Estas características que destaqué en la anterior respuesta hacen que pueda haber terroristas en cualquier país del mundo. Cerca de 30.000 extremistas extranjeros de 70 países distintos están operando. Entonces, estamos ante un fenómeno que puede ser una epidemia de atentados en cualquier lugar del mundo, no sólo a las capitales más involucradas en la guerra contra el ISIS.
– En esta lucha que plantea el ISIS entre el Occidente y el islam radical, y teniendo en cuenta que se está llevando a cabo la Cumbre del G20, ¿cómo deben actuar los países a corto y a largo plazo?
– Ayer el G20 sacó una declaración en la cual las consideraciones estuvieron concentradas a la problemática de terrorismo y a ver si se podía encontrar alguna respuesta por la guerra civil en Siria. Estamos ante un problema de muchas caras y muy difícil. Pero todos los países del mundo tienen que ayudar a intentar acciones multilaterales efectivas; control del manejo financiero, el tráfico de armas, la venta de petróleo para financiar sus operaciones, ya que se necesita una variedad de medidas, más allá de aquellas que deban ser necesarias en el campo militar, para frenar y poner límites para una situación que puede ser muy grave para todos los países. No hay país en el mundo que no tenga población musulmana, naturalmente estos grupúsculos no la representan en nada y todos sabemos que la amplia mayoría del mundo musulmán tiene una visión pacífica. Sin embargo, es evidente que habiendo 57 países con poblaciones musulmanas mayoritarias, según la Organización Islámica de Irán, y eso incluye a dos de América Latina (Surinam y Guayana), que los países musulmanes deberían encarar este tipo de cuestiones junto a aquellos que no lo son en una medida multilateral que pusiera restricciones al Estado Islámico, que están demostrando la capacidad de golpear a civiles inocentes de una manera terrible.
– Y en este marco político-internacional, ¿dónde se encuentra ubicada Argentina?
– La Argentina está en una situación compleja. Por suerte, estamos a 20 días de un recambio presidencial. En noviembre del año pasado, cuando la Argentina pertenecía al Grupo de Seguridad de Naciones Unidas, la misma presidenta de la Nación, en una sesión de Jefes de Estado del Consejo de Seguridad, tuvo comentarios irónicos sobre los pedidos de ISIS diciendo que parecía una aventura de Hollywood. Comentarios de ese tipo ponen en duda de qué lado de la vereda estuvo el gobierno «Cristinista» en estos años. Si hoy vas a la Cancillería, la oficina que tiene la responsabilidad temática en materia de terrorismo internacional fue prácticamente desmantelada. Fue a propósito o circunstancial, no lo sabemos. Pero la suma de comentarios hacen ver a la Argentina en una posición extremadamente ambigüa ante un peligro realmente grave, y sobre todo tratándose de un país como el nuestro, que sufrió dos atentados terroristas presuntamente de origen islámico. Consecuentemente, que nuestro país tenga actitudes ambivalentes es muy doloroso.
Para finalizar, García Moritán agregó: «Hemos visto la dignidad que tuvo Francia por responder a ataques terroristas. Pero por el contrario, del lado argentino vemos la búsqueda de la impunidad con el terrorismo en la firma del memorándum con Irán. Evidentemente, el próximo gobierno deberá observar estás situaciones con mucho cuidado y adoptar actitudes mucho más responsables».