Heroes for Life: voluntarios israelíes ayudan a niños de un barrio humilde de San Miguel

«Nunca fui una persona rica, pero siempre sentí la necesidad de ayudar  a cualquier otro que necesite más que yo. Por temas de tiempo y mucho trabajo que tuve durante el ejército no me daban los tiempos para poder hacer trabajo voluntario. Pero cuando termine la Tzavá hice un viaje por Sudamérica, y navegando por Facebook me apareció un banner de «Heroes for Life» y cuando leí en lo que consistía no tuve dudas de participar».

Julián Juarez, coordinador para Argentina del Team Oz, un argentino que durante plena crisis económica en el 2000 hizo Aliá con su familia con tan solo ocho años. Hoy con 25 años decidió emprender un camino solidario de voluntariado, hace ya tres años, sumándose a la ONG israelí, «Heroes for Life» que dan clases de inglés y matemáticas a chicos de un barrio humilde en la localidad de San Miguel, Provincia de Buenos Aires, y además ayudan a la refacción y construcción de espacios dentro del barrio.

La Cadena Judía de Información Vis a Vis tuvo la posibilidad de entrevistar a Julián quien no solo comentó la situación de carencias de todo tipo en las que viven los chicos que ayudan, durante dos semanas a través de está ONG, sino también la relación que se genera entre los voluntarios y los niños superando cualquier barrera idiomática.

La ONG «Heroes for Life» nació en el 2013 por tres ex soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel que estuvieron juntos por ocho años en una unidad de elite. Uno de ellos, Gili Cohen, se dio cuenta que los soldados que terminan la Tzavá hacen su tradicional viaje por el mundo, en general, a países con mucha pobreza. A partir de ese momento crearon esta ONG para capitalizar la expertiz de estos soldados israelíes para intentar hacer un mundo mejor. La primera delegación viajó a la India. Según datos que se encuentran en su página web, están ayudando a 1100 chicos en los cuatro continentes.

Siendo la tercera vez consecutiva que una delegación de voluntarios viene al Municipio de San Miguel, Julián relató la situación de pobreza en la que se encuentra el barrio que ayudan dentro del municipio con el Team Oz 2017, nombre que se le puso a la delegación en honor al Sargento Oz Mendelovich que fue asesinado en la Operación Margen Protector: «Nos dedicamos a brindar educación. Por ser un barrio desfavorecido están los problemas, que la gente de Argentina debe conocer más que nosotros, como casos de violencia, falta de presencia de los padres, escasez de alimentos, agua potable, cloacas, etc. Nosotros venimos a estar con los chicos a darle las clases de inglés, matemáticas y ciencias. Valores, eso ayuda muchísimo. También damos actividades contra la violencia para trabajar juntos respetando al otro, y además, siempre, tenemos un proyecto de refacción o pintar, lo que podamos hacer lo hacemos», remarcó Julián. 

¿Cómo fueron recibidos por los niños/as en la primera visita en 2015?: «La primera vez que llegamos teníamos nuestras dudas porque más allá de que es lugar nuevo, los voluntarios nuestros no necesariamente tienen que saber hablar español. Yo que nací en Argentina lo sé, pero el 80% de nuestros voluntarios no hablan castellano. Es muy lindo ver a que nivel trasciende todo el problema de comunicación del idioma; lo llamamos el idioma del amor. Yo veo voluntarios hablando hebreo con los niños de San Miguel o también utilizando gestos, ambos con una pasión, que se hacen entender… de verdad se entienden entre ellos.Para  todo lo que es el contenido tenemos traductores para poder transmitirlo mejor. Cada año que volvemos, con voluntarios nuevos,en menos de un día están super conectados con los chicos. El afecto de los dos lados es muy fuerte, no sé explicar cómo en dos semanas que pasamos en Argentina podemos formar ese vinculo, y cuando nos tenemos que ir,  nos cuesta mucho alejarnos de los chicos, de su cariño y viceversa».

En la charla que mantuvimos con Julián nos comentó que siempre estuvo muy al tanto de la situación socio-económica del país, ya sea por parte de su familia que todavía vive aquí como por sus padres, y además aclaró que la educación que le dan a los niños/as no es educación israelí, sino que a través de la educación no formal realizan las clases y las actividades especiales: «Acá (por Argentina) ir al colegio no es algo obvio, así que las mismas clases las damos en un comedor comunitario de la zona y también en unas escuelas primarias que nos abrieron las puertas. Nosotros llevamos adelante las clases de una forma diferente a la que lo haría una maestra en una escuela, y sentimos que podemos transmitir las cosas más fáciles. Pero dejame decir que las directoras y las profesoras con las que trabajamos acá hacen un trabajo extremadamente difícil. Nosotros no vamos a poder llegar a hacer un trabajo intenso como si fuéramos maestros, porque solo estamos dos semanas, pero el hecho de venir de afuera, hablar otro idioma y que estemos con una remera diferente ayuda a pasar el material escolar que los niños necesitan».

Para finalizar, Julián expresó qué aprende con este proyecto: «Yo tengo mi vida, este es un trabajo voluntario que lo hago todos los años y estoy muy feliz de hacerlo. Pero cada vez que vuelvo a San Miguel, siempre hay una sorpresa nueva. La gente busca algo tan básico, que no siempre tiene, que es una persona que este ahí para escuchar, alguien que le importa lo que le está pasando. Yo lo escuche de las madres de los chicos que me comentan que siempre hay gente que viene a donar alimentos y/o vestimenta, pero no tienen personas que se acerquen al barrio para conectarse y escucharlas. Cada año me conecto más y me es más difícil dejar este lugar».

LA POBREZA Y LA EDUCACIÓN, DOS CARAS DE UNA MISMA MONEDA:

Hoy en la Argentina hay doce millones de pobres que no pueden acceder a bienes y servicios básicos, según el INDEC. Los datos estadísticos del Censo del 2001 publicados en la página web del Ministerio del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación arrojaron, que el Municipio de San Miguel, solo el 6,97% de la población total se recibió en un instituto terciario o en la universidad. La mayoría terminó la primaria, pero no así el secundario (53.79%).

Otras cifras alarmantes que demuestran la baja en la calidad educativa del país y del por qué son importantes organizaciones como «Heroes for Life» son los datos estadísticos de las pruebas Aprender: en el nivel primario el 41,6% de los alumnos tiene serios problemas para desempeñarse en cuestiones de cálculos. El aumento de la deserción escolar durante el secundario más una situación de precariedad hacen que muchos padres envíen a trabajar a sus hijos, según las cifras que se dieron a conocer este año arrojaron que 715.484 de niños/as de entre 5 y 15 años realizan trabajo infantil en la Argentina, según lo indicó la Encuesta de Actividades de Niñas, Niños y Adolescentes (EANNA). De ese número total, solo en el Gran Buenos Aires hay 188.612 (8.4%).

 Video gentileza de Heroes for Life Facebook.

Fotos gentileza de Julián Juarez.

1 COMENTARIO

  1. Por que no ayudan a niños y ancianos en Israel?
    Muchos niños con problemas de salud en Israel necesitan de ayuda,de alguien con un auto que los lleve a hospital,asilos de ancianos necesitan de visitas y cariños,familias con niños que necesitan de atencion 24horas por dia que ni les da tiempo de salir de casa para llegar a un supermercado
    Pero nuestros jovenes hacen «el gran viaje»despues de servir al ejercito.
    Trabajo con los jovenes israelies y cuando les pido que hagan gmilut jasadim con niños y ancianos en Israel,me miran con una expresion….

DEJAR UN COMENTARIO

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí