Dos egresados de ORT tuvieron una innovadora idea millonaria y se transformaron en pioneros en el mundo del deporte

En 2018 Nicolás Sigal estaba terminando el secundario en la Escuela ORT Argentina y, a la par, jugaba en las inferiores de Ferro. Como futbolista notaba que siempre tenía ampollas y callos en los pies que le impedían tener el rendimiento que hubiera deseado. Empezó a pensar en posibles soluciones y se dio cuenta de que con medias que impidieran que el pie se deslizara se protegía de posibles lesiones y dolores.

Así -y junto con su amigo Tommy Cohen y compañero de colegio- buscó en el mercado local si había algún tipo de producto como el que necesitaba, pero no encontró nada parecido. Entre ambos surgió la idea de diseñar una media antideslizante pensada expresamente para la práctica de deportes con la marca Fox Socks. Buscaron la manera de producir en China y trajeron 250 pares para probar. Con una inversión inicial de apenas u$s 800, en 2019 se lanzaron a ofrecer y explicar las bondades sus producto en el círculo del fútbol profesional y amateur.

«Al principio fue complicado. Teníamos que convencer a conocidos y amigos de que estas medias que teníamos nosotros eran mejores. Por eso decidimos dejar que las probaran y, si no estaban conformes, les devolvíamos el dinero», cuenta Sigal.

Rápidamente empezaron a crecer en ventas y se dieron cuenta de que para poder crecer en la escala que querían, iban a necesitar localizar la producción en el país. Por eso salieron a la caza de proveedores, a quienes les mostraron el producto que tenían para que pudieran replicarlo.

Tras una primera etapa en la que las ventas se hacían de manera más artesanal, Sigal y Cohen decidieron recurrir a las redes sociales para incrementar las ventas. Buscaron influencers para que las usaran y, a la par, les escribían al inbox de Instagram a futbolistas reconocidos para ofrecerles un par de prueba.

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A partir de allí empezó una etapa de crecimiento acelerado. De los 250 pares de medias de la primera tirada pasaron a los 250.000 con los que prevén terminar 2023. Y, además, la compañía comenzó un plan de expansión con el lanzamiento de nuevos productos vinculados a la indumentaria deportiva.

Para ello crearon una nueva marca Tifox -acrónimo de Technology in Fox-, que será el paraguas para englobar toda la línea de la compañía. Además de medias, ofrecerán la línea Tifox Térmica, con remeras y calzas que concentran el calor del cuerpo. También ofrecerán conjuntos de short, remera y musculosa, y prendas para running, yoga y pilates, y accesorios bolsos botineros que eliminen el mal olor.

«Queremos que la gente tenga una posibilidad de tener una experiencia diferente cuando vaya a realizar deporte«, agregó Sigal.

Con la mira en 2025

Este año, la compañía espera terminar con una facturación de entre $ 250 millones y $ 300 millones. Para alcanzar ese objetivo expandieron su red de distribución a las principales cadenas de indumentaria deportiva del país. Además, lanzaron su propio canal de e-commerce e inauguraron nuevas oficinas en Villa Crespo, que incluyen un showroom.

Para el año que viene Tifox espera duplicar las ventas de 2023. Para ello invirtió $ 3 millones en una campaña de marketing que le permita ampliar el alcance, con presencia en redes, canales de streaming y vía pública.

«Tenemos trazado un plan de tres años. Este es el de la organización, el próximo nos consolidaremos en el mercado nacional y para 2025 esperamos empezar a abrir nuevos mercados en el Mercosur y otros países del continente«, cierra Sigal.

Vía El Cronista