Unas 500.000 personas participaron en una manifestación multitudinaria en Tel Aviv para exigir que liberen a los secuestrados restantes retenidos por Hamás desde el 7 de octubre, según los organizadores de la protesta. También, apuntaron contra el Gobierno.
Esto convertiría esta manifestación en la más grande en la historia de Israel.
En la manifestación de Tel Aviv, los organizadores afirman que la estimación ha sido confirmada por la policía.
Los activistas en las redes sociales dicen que decenas de miles de personas estaban protestando simultáneamente en Jerusalén, Haifa y Kfar Saba, mientras que miles también reunidos en ciudades como Beersheba, Netanya y Rishon Lezion; un total de 500.000 manifestantes.
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En una protesta en Carmei Gat, la ex rehén Adina Moshe, que fue liberada en la tregua de noviembre, dice que le contó al funcionario del Shin Bet que la interrogó sobre el peligro que corren los rehenes cuando las tropas de las FDI se acercan a los túneles donde están retenidos. “Cuando las FDI entran en esos túneles, es imposible salvar a los rehenes”, recuerda haber dicho, porque Hamás “los matará de inmediato”.
Añadió: “Todos mis amigos que estuvieron conmigo en cautiverio en ese túnel fueron asesinados, asesinados por Hamás porque las Fuerzas de Defensa de Israel se acercaron. A pesar de que advertí (¿pero quién soy yo?) que eso sucedería”.
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