El emocionante testimonio a corazón abierto de Ofelia Roitman en Fundación Judaica junto a Hernán Feler

El lunes lluvioso en Buenos Aires no fue impedimento para que el inmenso y hermoso templo de la Fundación Judaica en Belgrano estuviera colmado en sus dos pisos con gente en los pasillos para escuchar a la «tía» Ofelia Roitman en una charla/relato con su sobrino, el periodista Hernán Feler. «Conocí el infierno, el diablo y al demonio esos días en Gaza», expresó Ofelia.

Roitman estuvo secuestrada desde el 7 de octubre 53 días por la Organización Terrorista Hamás y fue liberada junto a otras tres mujeres el 29 de noviembre en un intercambio por terroristas palestinos que estaban presos en cárceles de Israel

Precisamente Feler fue quien inició una campaña que trascendió las fronteras pidiendo en cada relato de los partidos que él transmitía que vuelvan los secuestrados y «que devuelvan a mi tía Ofelia». Eso hizo que Roitman pasara a ser la secuestrada de la Organización Terrorista Hamás más conocida por la gente aquí en Argentina.

El periodista sigue con su campaña pidiendo por la vuelta de los 101 secuestrados que aún permanecen en Gaza.

Leer más: Uno de los fundadores de La Casa Belgrano fue herido en el Líbano

El Rabino de Judaica Adrián Fada fue quien ofició de anfitrión y conductor del multitudinario evento. Tali Lubieniecki cantó canciones emblemáticas antes y después de la charla.

Acompañada por su familia, no pudo ocultar su emoción en muchos pasajes de su relato. Fue cronológico y desgarrador. Su hija y su nieta también estaban presentes.

Ofelia estuvo 53 días secuestrada.

Comenzó el 7 de octubre cuando los terroristas ingresaron a su casa en el Kibbutz Nir Oz y se la llevaron en un tractor a la Franja de Gaza, hasta el momento de su regreso cuando se abrió una puerta y estaban su marido, hijos y nietos y la emoción no solo la embargó a ella sino que a todos los presentes.

Estuve 53 días, de los cuales 46 estuve en una casa sola. Casi sin luz, casi sin comida”.

En medio de su relato, Ofelia no pudo ocultar su emoción y, entre lágrimas, reconoció que los días en la Franja de Gaza “fueron muy hondos y difíciles”, aseveró. Y en esa misma línea, aseguró que tanto ella como otras personas secuestradas tenían “mucho temor” de lo que pudiera ocurrir.

Salvo un solo jefe de los terroristas que trataba de mantenerla calma, el resto la insultaba y buscaban afectarla psicológicamente. La hicieron ingresar a un tunel y estuvo 46 días casi sin hablar y sin comer. En muchos de esos momentos creía que venían a matarla. Lo que serían los últimos siete días la llevaron toda tapada a una casa donde vivía una familia que recibía un dinero de los terroristas.

Leer más: El heroico accionar de un voluntario de MDA en el ataque terrorista en el sur de Israel

Había un niño de 3 años que se le acercó pese a que la madre se lo impedía. Un día el nene escuchó que Ofelia le había pedido «algo dulce» a su madre y que se lo había negado. El día siguiente se sacó un caramelo de la boca y le dio la mitad. Ella sintió una felicidad inmensa y reflexionó: «A esa edad los chicos son sanos e inocentes, cuando crecen les dan armas y les contaminan la cabeza»

Durante su secuestro en la casa le pidió a la mujer un papel y un lápiz ya que quería escribir (pensó en Ana Frank) y comenzó a hacerlo día por día y saludando a quienes cumplían años. Cuando la estaban trasladando para el intercambio se le cayeron los papeles que tenía escondido dentro de su ropa y uno de los terroristas los quemó. De todas maneras los está recreando «despacito y con mucho espacio entre una hoja y otra ya que se me tiene que venir todo a la cabeza»

Otro momento muy emotivo fue cuando relató que necesitaba mover la boca, hablar y tapándose con la mano cantaba despacito «Mi Buenos Aires querido, cuando yo te vuelva a ver». Recreó ese momento ante un auditorio colmado de emoción.

Leer más: Brutal ataque terrorista en el sur de Israel: un muerto y varios heridos

Al finalizar, recibió un presente de «Juntos por Israel», la organización de la que forma parte Feler y sigue recaudando dinero para ayudar a la reconstrucción de los kibbutzim destruidos a las familias desplazadas.

Ofelia agradeció a todos los presentes, a su familia, a la gente de Juntos por Israel y a todos los argentinos que acompañan y acompañaron desde el primer día.

Ofelia Roitman pasó por Buenos Aires y pudo contar su historia. Todavía hay 101 que están allá, 320 días más viviendo el horror de los que vivió ella en sus 53 que estuvo secuestrada. El Hatikva (himno de Israel) cantado a viva voz, cerró el emocionante encuentro.