Israel Katz, ministro de Defensa de Israel, confirmó la suspensión de las promociones de los altos mandos de las FDI hasta que el ejército presente todas las investigaciones sobre la masacre del 7 de octubre.
Katz puso el 31 de enero de 2025 como fecha límite para que el jefe del Estado Mayor, teniente general Herzi Halevi, entregue las investigaciones.
Los ministros de derecha, que instaron a un cambio radical en la cima de la estructura de mando de las FDI, elogiaron la medida.
En un comunicado emitido por la oficina de Katz, el ministro ordenó al jefe de las FDI que le muestre todas las investigaciones del 7 de octubre que se han completado hasta ahora.
Aunque el gobierno rechazó designar una comisión estatal de investigación y se opuso a cualquier investigación que pudiera incluir el examen de los fracasos políticos que rodearon el devastador ataque de Hamás, sus preparativos y sus consecuencias, el ejército llevó a cabo investigaciones internas para averiguar qué salió mal.
«Es deber de las FDI terminar las investigaciones lo antes posible para presentarlas a las familias y al público en Israel, y extraer lecciones y conclusiones necesarias», afirmó Katz en su declaración.
Halevi indicó que tiene la intención de dimitir una vez que el ejército complete la investigación sobre la masacre del 7 de octubre.
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Además, Katz expresó que se negará a autorizar el ascenso de oficiales al rango de mayor general. También se opondrá al nombramiento de cualquier mayor general para nuevos cargos, hasta que revise las investigaciones “y aprenda y comprenda su significado y posible efecto sobre los candidatos a la promoción”, dijo su oficina.
Los ascensos en las FDI desde el ataque del 7 de octubre recibieron críticas de algunos sectores. Uno de los argumentos que manifestaron fue que Halevi fracasó en su papel, por lo no debería ser él quien designe a los comandantes.
El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, elogió la medida de Katz como una “decisión digna que representa un cambio positivo y refrescante, en contraposición a las políticas de Gallant”.
El ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, expulsado de su cargo, respaldó la creación de una comisión estatal para investigar a los líderes políticos.
Smotrich, líder del partido de extrema derecha Sionismo Religioso, escribió que era necesario “reconstruir el alto mando de las FDI y nombrar sólo comandantes que no fueran parte de la ‘concepción’ de contención y moderación”, una referencia a la creencia que sostienen en el establecimiento de seguridad antes del 7 de octubre de que Hamás se vio disuadido de lanzar un ataque importante debido a las consecuencias esperadas.
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El ministro de Seguridad Nacional, aliado de extrema derecha, Itamar Ben Gvir, también respaldó a Katz. En una declaración manifestó que es una “decisión lógica y correcta” no ascender a los oficiales hasta que se complete la investigación.
“Llegó el momento de reemplazar a toda la generación de la ‘concepción’ en las FDI”, aseveró.
El líder del partido opositor Demócratas, Yair Golan, ex comandante adjunto de las FDI, criticó la decisión de Katz. «Un negociante político no puede ser ministro de Defensa», aseguró, y dijo que es «triste» que Katz amenace al jefe del ejército.
Vía The Times of Israel