«Queremos a Hitler»: la vergonzosa interrupción antisemita de un político de un país africano

Tebogo Nkounkou
Tebogo Nkounkou

Un concejal de Johannesburgo, la ciudad más grande de Sudáfrica, interrumpió el discurso de un colega judío y afirmó: «Queremos a Hitler».

Tebogo Nkonkou, miembro del Congreso Panafricanista de Azania (partido político sudafricano), comenzó a gritar mientras hablaba Daniel Schay, concejal judío del partido Alianza Democrática (DA), y amenazó con usar una camiseta con el rostro de Hitler si el político continuaba usando una notebook con una carcasa con la bandera israelí-sudafricana y una corbata con la bandera de Israel.

Nkonkou exigió que no se exhibiera la bandera israelí en cámara porque representa la muerte de mujeres y niños inocentes.

Daniel Schay
Daniel Schay

«Yo también iré con una camiseta con la cara de Hitler», le dijo Nkonkou a la presidenta de la Cámara, Nobuhle Mthembu. «Lo haré porque usted permitió que esto sucediera».

Mthembu, por su parte, dijo que Nkonkou estaba dando un mal ejemplo, pero continuó interviniendo el discurso de Schay, al punto de exclamar: «Queremos a Hitler».

Un miembro de otro partido sudafricano, Luchadores por la Libertad Económica, dijo que la exhibición de la bandera israelí era un abuso hacia ellos.

“Esta bandera, de verdad que no la soportamos; no soportamos la bandera de un país con apartheid en un país donde sufrimos el apartheid. Aún hoy están matando a niños en Gaza, y ustedes lo están viendo”, aseveró.

Además, los concejales continuaron con su abucheo a Schay, criticaron la “bandera racista” y corearon: “Desde el río hasta el mar, Palestina será libre”.

Schay dijo en X que el comportamiento del organismo que dirige el Congreso Nacional Africano demuestra por qué el presidente estadounidense Donald Trump odia al partido.

La Junta Judía de Diputados de Sudáfrica denunció la retórica de Nkonkou como «aborrecible» y calificó su llamado «Queremos a Hitler» como «un flagrante acto de intimidación antisemita dirigido al único concejal visiblemente judío. Tales comentarios no solo son moralmente repugnantes, sino también legalmente indefendibles».

“Sudáfrica es un país construido sobre los principios de la democracia, la inclusión y el respeto a los derechos humanos. Que un representante público electo invoque a Hitler —una figura sinónimo de genocidio y el exterminio sistemático de seis millones de judíos— como amenaza a un concejal judío es despreciable, profundamente ofensivo y contrario a los valores que todos los sudafricanos aprecian. Además, cuestiona si dicha persona debería ser idónea para cualquier cargo público. La SAJBD condena estas declaraciones y el ambiente hostil que crean”, declaró la Junta en un comunicado.

 

Vía JPost

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